sábado, 24 de octubre de 2009

Carta a la eternidad y su morador.

Querido amigo: Debo decirte que gracias a tu ayuda, sigo optimista. No me desanimo, pero ahora miro dos veces antes de tocar. Pensar que no tenía oportunidad fue un gran error. En eso tenías razón. Como en todo. Pero tú también entiende que parece imposible lograr unas palabras suyas. De todas formas, una mirada vale más que mil palabras, ¿verdad? Tu silencio es la mejor medicina. Ya sabes que no hace falta que me contestes, sé lo que debo hacer... Pero aún no. Soy demasiado... ¿cobarde? Da igual, elige tu la palabra. Silencios y una sonrisa, mi subconsciente.

6 comentarios:

  1. jodeeer, kada vez k leo lo k escribes me dan ganassss de llorar...y kien kiera k sea la persona de kien ablas sera muuuuuu afortunada. de:ANGELYTO

    ResponderEliminar
  2. Mmmmm... está muy incompleta con muchos vacíos... eso me gusta te lo tienes que imaginar todo solo, no siempre hay que contarlo todo.
    Saludos

    ResponderEliminar
  3. No es un "está bien", me gusta mucho, me parece un muy buen texto.
    Saludos

    ResponderEliminar
  4. Ufff! Es triste, porque en tus palabras veo algo que ya conozco. Qué cosas tiene la vida, crees que sólo vives tus experiencias, únicas, irrepetibles y después te das cuenta de que hay cientos de personas que han vivido o viven o vivirán experiencias semejantes...Un beso Lucía.

    ResponderEliminar