viernes, 13 de mayo de 2011

So bye-bye, my dear friends!

El tiempo es mas preciado cuando se acaba. Cuando los últimos granos de arena avanzan rápidos hacia el abismo.
El tiempo.
Tres años ya.
Seis años ya.
Apenas siete meses.
Todos mis amigos se dan cuenta de lo que valgo, y tienen miedo de perderme. Seré cruel, pero me siento bien. Realmente tengo ganas de marcharme; no por dejar nada atrás, sino por lo que me espera delante. Fingo resignación, tristeza, y rabia.
Pero tengo ganas de irme.
De marcharme, y volver en veranos cada vez más cortos; de hacer nuevos amigos, de probar nuevas experiencias, de reírme de chistes diferentes, de encontrarme otros retos, de extrañar lo que ya no tendré.
Porque cuando llegue el día de la despedida, lloraré. Estoy segura.
Lloraré cada día, cada segundo, cada amigo, cada charla, cada burla, cada lágrima, cada momento en desuso, cada regañina a mi compañero de mesa, cada amago de corte de pelo.
Seguramente, ellos me echarán más de menos que yo. Porque yo me voy ellos se quedan.
Aquí dejaré muchas personas importantes, y me costará especialmente despedirme de una: mi mejor amiga.
Ella, con la que tan mal me comporté en los primeros años, y que cuando se fue esos tres meses a Colombia, pensé que la había perdido; fue un verdadero infierno. Luego regresó y cambié por completo; gracias a ella, una parte de mi es como es ahora.
Pero también le dolerá mas a ella.
No quiero que el dolor me asfixie.

Menos mal que, por lo menos, me llevo algo de aquí (aparte de arena en las orejas): otra persona.
Ésa si que no quiero perderla. Por nada.
Vale mucho, y creo que todavía no me he dado cuenta.

***

So bye-bye, my dear friends! Nos queda aun un mes de clase, y me quedan casi dos meses aquí. Admito que os echaré de menos. Os quiero mucho. A todos.
Prometo visitaros algún día.
¡Yo nunca rompo mis promesas!

miércoles, 11 de mayo de 2011

Grima

Estoy escuchando/viendo el "Treno a las Víctimas de Hiroshima". Siento el miedo, realmente. El agobio, el terror, el pánico que atenaza tanto músculos como mente.
Escuchadla, no tiene pérdida. Además el video va acompañado de imagenes. Son verdaderamente letales.
Hasta aquí el prólogo del post.

***

Unas uñas que arañan la pizarra.
Las uñas largas de un perro resbalando contra el mármol.
Las uñas de mi profesora de Lengua cuando las choca contra la mesa.
Arañas largas; de ésas que parecen una bolita negra con patas largas y finas.
Una bisagra oxidada que chirría al abrirse la puerta.
El petróleo sobre mi piel.
La sangre coagulada.
Alguna que otra tortura de Saw.

.. Y, a vosotros, ¿qué os da grima?